Tecnólogos no deben hacer trámite para que su título se registre como de tercer nivel.
Los institutos tecnológicos formar y profesionalizan a los futuros profesionales como entes innovadores, convirtiéndolos en líderes vinculantes del progreso económico y social es la visión del Instituto Bolivariano. Ahora este grupo de nuevos profesionales debe insertarse a la actividad productiva del país, desde la perspectiva laboral pública o privada.
La reforma a la Ley Ley Orgánica de Educación Superior (LOES), por la que los títulos tecnológicos son considerados de tercer nivel es de carácter retroactivo, por tanto, en un plazo no mayor a un año desde la entrada en vigencia de la nueva LOES, que fue en agosto pasado, los títulos de los institutos técnicos, tecnológicos, pedagógicos, de artes y los conservatorios superiores, que fueron emitidos antes de la publicación de la ley, serán considerados títulos de tercer nivel y deberán ser registrados como tal por la Senescyt.
Ante lo expuesto, según un comunicado de la Senescyt (Secretaría de Educación Superior, Ciencia, Tecnología e Innovación), los usuarios del Sistema de Educación Superior no requieren hacer ningún trámite previo para que su título sea registrado como de tercer nivel sino que es la Senescyt como órgano rector de la política pública encargada de este registro, la entidad que realizará la gestión interna correspondiente para que los títulos de los Técnicos y/o Tecnólogos que actualmente se encuentran cargados en la Plataforma de Registro de Títulos, aparezcan como de Tercer Nivel Técnico-Tecnológico.
Otra de las reformas a la LOES es que los tecnólogos puedan cursar maestrías tecnológicas; antes solo eran reconocidas las maestrías académicas.
Para cursar una maestría tecnológica, los tecnólogos deben cursar primero una tecnología superior universitaria.
Adicionalmente, los Institutos Superiores que alcancen la condición de superior universitario, podrán además ofertar Tecnologías Superiores Universitarias cuyo título es el habilitante para acceder a una maestría tecnológica. (I).
Fuente: El Universo, 22 de mayo de 2019.